El pescado a la plancha o simplemente rebozado no
es uno de mis platos favoritos, me lo como, e incluso pensaré que está rico
pero no lo haré para un domingo festivo. Sin embargo todo cambia cuando el
pescado se hace al horno, y más todavía cuando es rape. El pescado, que junto
con el emperador, menos pescado parece. Aquí el sabor de los frutos secos y las
gambas hace que quede absolutamente perfecto (bueno, al menos a nosotros nos
gusta mucho).
Ingredientes (el caldo de pescado):
-      Las raspas y media cabeza del rape.
 
-     
Las cabezas y cascarones de las gambas.
 
-     
2 zanahorias.
 
-     
1 cebolla.
 
-     
1 puerro.
 
-     
1 cucharada de Aceite de Oliva Virgen Extra.
 
-     
500 mililitros de agua.
 
Ingredientes (4 personas):
-     
2 lomos de rape.
 
-     
20 gambas grandes.
 
-     
50 gramos de almendras.
 
-     
2 rebanadas de pan.
 
-     
1 ajo.
 
-     
3 patatas grandes.
 
-     
2 cebollas de Fuentes.
 
-     
1 cucharadita de pimentón dulce.
 
-     
2 cucharadas de harina.
 
-     
400 mililitros de caldo de pescado.
 
-     
150 mililitros de vino blanco.
 
-     
Aceite de Oliva Virgen Extra (AOVE).
 
-     
Sal.
 
-     
Pimienta.
 
Preparación:
Caldo de Pescado:
Lo primero que hacemos es preparar el caldo de
pescado. Recordad que siempre partimos de agua del tiempo, nunca de agua
caliente. Colocamos la cucharada de AOVE y cuando comience a calentar echamos
las cabezas de las gambas y las cascaras. Dejamos que se sofrían un poco,
incluso podemos machacarlas un poco con una cuchara de palo, y antes de que se
tuesten, echamos las raspas, las verduras y el agua. 
Queremos un caldo compacto, concentrado con sabor,
por eso no añadimos más agua. Dejamos que cueza 15 minutos y apagamos. 
Los caldos de pescado no deben de cocer mucho
tiempo. Si durante la cocción sale espuma, retirarla.
Pescado:
Lo primero de todo es cortar los lomos de pescado
en trozos, a ser posible todos de un tamaño similar, salpimentamos. En una
bolsa de congelar pondremos la harina, y pondremos todo el pescado, damos unas
vueltas y nos quedará perfectamente enharinado.
En una sartén bastante amplia, se ponen como unas
tres cucharadas de AOVE, y se fríe el pescado, no debe quedar hecho del todo,
solo sellado, por lo que lo tenéis unos dos minutos no más tiempo.
Se saca a un plato hondo, y se reserva.
En la misma sartén freiremos las patatas y la
cebolla, con abundante AOVE, y a baja temperatura, queremos que se confite, que
se hagan pero que no cojan color. En tiempo será como unos 20 minutos y en mi
placa al 4 de temperatura.
Hecha la patata, la escurrimos muy bien, y la
colocamos en una fuente que pueda ir al horno. Sobre ella ponemos los trozos de
rape.
Salsa:
En una sartén no muy grande ponemos dos cucharadas
del aceite que ha sobrado de freír las patatas con cebolla, y freímos el ajo y
el pan. Deben quedan con color pero no quemados sino ese sabor pasaría al
asado. 
En cuanto estén, se machacan en un mortero con las
almendras, y cuando estén bien picados se añade el vino blanco y un poco de
caldo de pescado, y se vierte todo sobre el pescado con las patatas y las
cebollas. 
Colocamos las gambas sobre el pescado, con un
poquito de sal sobre ellas, y metemos al horno, que habremos precalentado a 170
grados anteriormente.
Tendremos en el horno unos 10 minutos, e iremos
añadiendo caldo de pescado conforme sea necesario.
Servir inmediatamente.
(La foto como podéis ver no la ha hecho mi otra
parte contratante, no estaba y yo tengo mucha menos paciencia, pero os aseguro
que estaba riquísimo)
Recomendaciones:
1. Si los gambones o las gambas os gustan menos
hechas añadirlas cuando haya pasado unos 5 minutos, así quedarán más al punto.
2. No tiréis el aceite de hacer las patatas y la
cebolla es un aceite limpio que se puede reutilizar tranquilamente.